Completando la trilogía de lanzamientos para sistemas de "arcade" iniciada a principios de los años 90’s llegaría el título correspondiente a la aclamada mini serie de O.V.A.’s, co-dirigida por Shinichiro Watanabe y Shoji Kawamori.

El desarrollo del juego correría a cargo nuevamente a cargo de la hoy extinta compañía NMK (Nihon Maicom Kaihatsu), luego de haber lanzado otros dos memorables títulos para estas plataformas, como lo serían los recordados, “Cho Jikuu Yousai Macross” y “Cho Jikuu Yousai Macross II”, por lo que la jugabilidad de este título compartiría prácticamente los mismos rasgos característicos de los entrañables juegos del estilo conocido como “shooter” tan populares en aquella época.

Muy como el material fuente, en el que está basado, este juego presentaría una notable mejoría en el apartado visual, recurriendo a gráficos modelados en tercera dimensión, no sólo en su vistosa secuencia de apertura, sino también en los niveles propiamente dichos del título, siendo esta cualidad, la que le haga resaltar en esta trilogía de memorables “mata marcianos”.

Sin embargo, el juego significaría un notable alejamiento del argumento de la mini serie original, al no presentar básicamente ninguna premisa, presentando niveles genéricos, que bien hubieran podido representar cualquier otra entrega de la franquicia, ignorando por completo, la rivalidad existente entre los personajes principales, Isamu Alva Dyson y Guld Goa Bowman, sin mencionar que los vastos diseño mecánicos mostrados en la O.V.A. de 1994 y su adaptación cinematográfica de 1995, son ignorados casi por completo, obviamente a excepción de las valquirias YF-19, YF-21 y VF-11, quienes se enfrentan a enemigos cuyos diseños no corresponden a ninguno de los realizados por Shoji Kawamori y Kazutaka Miyatake.

Además de los dos pilotos protagonistas de la obra, el jugador tiene la opción de seleccionar un tercer personaje femenino, una piloto sin nombre, de la que no se tiene ninguna clase de información, más allá de la breve secuencia mostrada al completar el juego con ella, y que, por supuesto, sería creada exclusivamente para este juego.

Otro aspecto a destacar es que el juego tampoco recurriría a la magistral banda sonora compuesta por Yoko Kanno para el proyecto original, decidiendo así utilizar composiciones originales, más acordes al trepidante ritmo de los juegos de este género, los cuales si bien resultan estimulantes, acaban por cumplir una función meramente ambiental, sin llegar si quiera a recuperar alguno de los motivos apreciables en la memorable música de Macross Plus, significando esto por tanto, otro notable alejamiento del material que inspirara el juego en cuestión, y por la que al final del día, esta música no resultara digna de preservarse y apreciarse en un álbum propiamente dicho.

La dificultad del título presenta un ligero incremento en comparación con sus antecesores, al presentar una velocidad un poco mayor, estando así enfocado a un segmento de jugadores un tanto más experimentados, quienes siguieron encontrando la dinámica del mismo, acorde a sus preferencias, al estimular las competencias entre jugadores en las salas recreativas de la época con la meta de superar las más altas puntuaciones alcanzadas por sus rivales.

Este sería el primer juego basado en la O.V.A. Macross Plus y el último en ser lanzado para sistemas "arcade", plataforma que comenzaría a ser gradualmente desplazada por las consolas caseras a partir de entonces, decidiendo así BIG WEST enfocarse cada vez más a juegos más cercanos a simuladores de vuelo, los cuales resultarían siendo incompatibles con estos recordados sistemas.

Aunque entretenido, el juego puede llegar a resultar un tanto genérico, al usar como excusa la aparición de una nueva serie de Macross para lanzar otro juego, pero paradójicamente guardando muy pocas semejanzas con la mencionada obra, pudiendo bien tratarse de cualquier otro título.

Al igual que mucho del material relacionado a la marca Macross Plus, este juego lograría llegar a occidente, en el año de 1997 recibiendo así una completa traducción al idioma inglés, aunque sin llegar a alcanzar los exorbitantes niveles de popularidad de otros títulos de la época, gozando sin embargo, de amplia disponibilidad hoy en día entre las comunidad de emulación informal.

A pesar de las abismales diferencias entre la obra original y el juego en cuestión, este no deja de ser bastante disfrutable, siendo una eficiente alternativa para pasar una tarde nostálgica revisitando una época entrañable para quienes disfrutaron de la era dorada del "arcade".