Cho Jikuu Yousai Macross (1992)

El auge de la industria de los video juegos que a principios de los años 90’s parecía encontrarse en un punto cumbre dio pie al desarrollo de numerosos títulos que tuvieron salida a un igualmente variado mercado que comprendía tanto las consolas caseras, como los sistemas “arcade” o máquinas recreativas ubicadas en centros de esparcimiento público, como lo fueron centros de juego específicos para estos sistemas, así como centros comerciales, restaurantes, bares e incluso farmacias y tiendas misceláneas (en el caso específico de América latina, usualmente de manera informal utilizando copias apócrifas de diversos sistemas).

Por supuesto, una franquicia con el potencial como Macross no podía desaprovechar este fenómeno tanto económico como cultural, dando así luz verde al desarrollo de una serie de títulos para sistemas arcade, siendo el primero de ellos, un juego basado enteramente en la película “Cho Jikuu Yousai Macross Ai Obete Imasuka?” de 1984, encargando su desarrollo BIG WEST a la hoy desaparecida compañía “NMK” (Nihon Maicom Kaihatsu), recordada precisamente por sus juegos pertenecientes al género “shoot ‘em up”, y siendo publicado Banpresto, compañía subsidiaria de la juguetera Bandai.

Se trata pues, de un juego del género shoot ‘em up con desplazamiento de pantalla vertical, muy similar a títulos célebres de la época como la serie P-47 publicada por Jaleco Ltd. y Zed Blade publicado por SNK, estando provisto de una dinámica de acción algo saturada pero no por ello haciendo al título menos entretenido.

Es el segundo juego de vídeo en retomar la estética e historia de la película “Ai Oboete Imasuka?”, aunque por supuesto, de manera más detallada que su muy limitado predecesor desarrollado para la Famicom, aunque curiosamente compartiendo el mismo nombre, titulados así  simplemente como “Cho Jikuu Yousai Macross” omitiendo por completo el subtítulo que identificara al filme de 1984.

Comprendiendo siete niveles y teniendo la capacidad de incorporar un segundo jugador, el título gozó de una moderada popularidad en Japón, para ser incluso exportado a Estados Unidos unos meses después de su lanzamiento en el país del sol naciente, teniendo así el mérito de haber logrado ser el único video juego de la franquicia en haber podido llegar a occidente, ya que en esa época no existía un litigio como tal entre BIG WEST y Harmony Gold, pudiéndose encontrar el gabinete del juego en algunas salas de arcade de la unión americana aún en la actualidad, llevando el título de “Super Spacefortress Macross”, quedando esto como el primer indicio de traducción alguna al original japonés “Cho Jikuu Yousai Macross”, y que sin  saberlo, habría de ser retomado años más tarde para la llegada de una segunda versión doblada de la película en cuestión para América latina.

Al estar plenamente basado en la adaptación cinematográfica de 1984, el argumento del juego sigue las secuencias de acción mostradas en dicho largometraje con algunas debidas modificaciones para adaptarse a la dinámica de un juego de arcade, alargando e incorporando algunas de estas secuencias, mientras que la música no va más lejos de cumplir con una intención meramente ambiental, retomando los motivos más esenciales de la banda sonora del material fuente para el juego, naturalmente en una versión marcadamente sintetizada, complementándola con algunas composiciones algo genéricas dotadas de apenas unos cuantos arreglos y cajas de ritmo de las que poco más se puede decir, haciendo su reaparición así piezas como la imprescindible “Dog Fighter” además de las célebres canciones “Shao Pai Long” y la ya icónica “Ai Oboete Imasuka?” del personaje de Lynn Minmay.

La jugabilidad del título, aunque bastante dinámica con el tiempo se vuelve monótona al repetir básicamente el mismo mecanismo en cada misión, teniendo la posibilidad de cambiar a las tres transformaciones de las unidades valquiria (Caza, Gerwalk y Battroid), pero no libremente, debiendo el jugador obtener una serie de “power ups” (mejoras que el jugador puede obtener conforme va avanzando en un juego, ya sea aumentando sus puntos de salud o de ataque, en este caso, aumentando la potencia de fuego de la valquiria), los cuales incluso pueden otorgar al jugador del modo blindado (la armadura GBP-1S provista de una gran cantidad de misiles, granadas y resistencia al fuego enemigo, vista tanto en la serie de televisión como en su adaptación cinematográfica).

Sería este el primer juego de la franquicia que ofrece un sistema de dos jugadores simultáneos, debiendo así el jugador 1 controlar al personaje de Hikaru Ichijo y el jugador 2 al personaje de Maximilian Jenius, teniendo este último capacidades inferiores en contraste con el protagonista, de manera marcadamente opuesta a lo visto tanto en la serie como en su película, teniendo así ambos jugadores una participación simultánea en el juego.

Como era usual en la época, el juego cuenta con algunos cortes de escena que muestran secuencias con animaciones muy básicas que no hacen otra cosa más que recrear algunas de las escenas más recordadas de la película de 1984, careciendo por completo de diálogos grabados o si quiera en texto.

A pesar de resultar en primera instancia un título visualmente atractivo y entretenido, la baja dificultad del mismo limita al juego para trascender como un clásico del género, debiendo incluso completar las siete misiones del juego dos veces seguidas para obtener el verdadero final del mismo, lo que da una idea de lo sencillo que resulta completar cada misión, aunque teniendo la segunda vuelta una dificultad ligeramente más elevada, pero que a la larga otorga un desafío prácticamente nulo para el jugador más experimentado, lo que sin duda acaba demeritando el título severamente.

Al haber sido un juego desarrollado exclusivamente para sistemas arcade, la disponibilidad actual del mismo es prácticamente nula, sin mencionar los elevados precios que un gabinete de estos llega a alcanzar, siendo la única alternativa un trato entre particulares o sitios como ebay, con todas las complicaciones logísticas que ello implicaría, permaneciendo así estos gabinetes en las más fastuosas colecciones privadas, principalmente en Estados Unidos, mientras que por el contrario, el juego es ampliamente conocido en las comunidades de emulación informal en internet en donde goza de bastante popularidad tanto por su estética como por los recuerdos que evoca en los jugadores más veteranos que tuvieron la oportunidad de vivir el momento en el que el único juego de Macross que pudo llegar a occidente de manera oficial estuvo presente en su sala de recreativas local.