El Legado de la Protocultura

Gracias al enlace mental existente entre Guvava y Mylene, ambos finalmente se reúnen, luego de un par de aventuras, durante la cuales finalmente Mylene antepone el poder de la música ante la fuerza bruta.

Sintiendo gran impotencia aún Basara sigue recorriendo el Planeta Lux, hasta finalmente localizar a Sivil, quien se encuentra aún en animación suspendida en una especie de volcán en medio del océano, en donde ya se encontraba Gigil, intentando llegar a su amada.

Basra y Gigil finalmente logran llegar ante la presencia de Sivil, luego de sobreponerse a algunos obstáculos, llegando Basara a salvar la vida del testatrudo Gigil.

Una vez frente a Sivil, Basara decide cantar con toda su pasión, causando finalmente una inesperada reacción en Sivil y en la superficie de la cueva en donde se encontraba, emergiendo del océano unas misteriosas ruinas que resultan haber sido construidas por la protocultura.

Mylene y Gamlin se dirigen hacia las ruinas, contactando inmediatamente al puente de mando del “Battle 7”, quienes envían al Consejero Exsedol a investigar la zona.

Al adentrarse en las ruinas, Mylene resulta herida en una de las trampas dispuestas en sus interiores, derramando un poco de sangre, la cual casualmente resulta ser la clave para acceder a una misteriosa cámara, en donde se encuentran con una especie de consciencia pre grabada, la cual revela el origen de los misteriosos protodeviln, los cuales igual que los zentradis han sido creados por la protocultura, siendo sellados sin embargo en el 4to. Planeta del Sistema Varauta por un misterioso poder llamado "Anima Spiritia".

Mientras tanto, una reactivada Sivil lleva a Basara y Gigil a recorrer la galaxia, al haber obtenido gran poder gracias a la música de Basara. Sin embargo, al mismo tiempo, temiendo que sus presas descubran la clave para volver a encerrarles, Gepelnitch envía a sus fuerzas para destruir las ruinas de la protocultura.