Un recuperado Gamlin decide emprender una operación de rescate, acompañado por Mylene, llegando a neutralizar con tranquilizantes a los terrotistas zentradi, confrontándose sin embargo al final con Sivil quien lograría llegar hasta el despacho de la Alcaldesa Milia, causando un instintivo terror en la zentradi. Gamlin fallaría nuevamente al enfrentarse a Sivil, quien saldría huyendo al encender accidentalmente un televisor que casualmente transmitía un vídeo de Fire Bomber, causándole una vez más gran conmoción en su interior.

Ya infiltrada en Ciudad 7, Sivil quien tiene la habilidad de poseer el cuerpo de otras personas, como si se tratara de un espíritu maligno, toma control del cuerpo de Rex con la finalidad de acercarse a Basara de maneras muy sugerentes, causando gran conmoción en Mylene.

Sin embargo, al volverse a ver expuesta al canto de Basara, Sivil sale huyendo irremediablemente una vez más, abandonando el cuerpo de Rex en el bosque dejándole en estado vegetativo tras absorber su spiritia.

Sin embargo, esta no sería la última vez que Sivil intentara tal artimaña, pues la repetiría al poseer a Akiko, causando aún más situaciones comprometedoras con Basara, dando pie a malos entendidos con Mylene y Gamlin.

Mientras tanto, el Capitán Maximilian comparece ante el alto mando de las Fuerzas Unidas de la tierra, al contar con la información del piloto prisionero enemigo, y la aparición de un misterioso ser no identificado dotado con poderes increíbles, como la capacidad de viajar a la velocidad de la luz, lo que su consejero el antiguo archistva Exsedol Folmo, identifica en su mente como “protodeviln”.

Contando nuevamente con su VF-17, Gamlin continúa defendiendo Ciudad 7 al lado de la Alcaldesa Milia ya recuperada siendo neutralizada sin embargo durante el combate al no estar plenamente en sus capacidades aún, ganándose así una reprimenda de su antiguo discípulo.