Decepcionados por el comportamiento de Minmay, los zentran pierden la paciencia y rompen la tregua con los humanos, decidiendo así aniquilarlos definitivamente, lanzando un ataque final sobre la fortaleza y su amenazante cultura, interrumpiendo así el idílico momento de la declaración de Hikaru a Misa, saliendo este desesperadamente a buscar a Minmay para tratar de convencerla de cantar la antigua y mítica canción ahora completa.

Al mismo tiempo Milia 639 regresaba con el refuerzo de la flota principal meltran comandada por Laplamiz e inesperadamente con Max ahora formando parte de las filas meltran habiéndose incluso sometido a un proceso de "macronización", sentando así el escenario para la épica confrontación final que definirá el destino de la antigua cultura perdida.

Hikaru finalmente logra encontrar a Minmay quien de forma tajante se rehúsa a colaborar con Hikaru y Misa, decisión influenciada por un visceral despecho que le ha provocado el desdén de Hikaru, llegando incluso a renegar del destino de la humanidad, deseando incluso que todos murieran salvo ella y Hikaru, lo que provoca la ira de este mismo, al recordar a sus camaradas caídos y a toda la gente que ha sufrido desde el comienzo del cataclismo, abofeteándola para hacerle entrar en razón sobre la actitud frívola e insensible que está asumiendo.

Es en ese momento que Minmay finalmente entra en razón y motivada por el anhelo de honrar la memoria de sus padres y por el bien de la humanidad decide interpretar la mística canción ancestral de la que se dice tiene el poder de lograr lo imposible.