Cho Jikuu Yousai Macross: Synthesizer Fantasy (1983)

Fecha de lanzamiento: Abril de 1983

Sello: Columbia

En Japón, principalmente durante los años 80’s, existió una tendencia de lanzamientos de bandas sonoras de las series más populares del momento en particulares arreglos para sintetizador, que fueron conocidos como las series Digital Trip, los cuales se caracterizaban por emplear un equipo bastante primitivo en lo que respecta al campo de la música electrónica, fue así como aparecieron lanzamientos pertenecientes a esta serie, de títulos como Galaxy Express, Gundam, Captain Tsubasa, la propia Southern Cross e incluso Nausicaä, y por supuesto la franquicia macross no podía quedar exenta.

Este lanzamiento incluye una curiosa lista de temas de la serie original de televisión de 1982, tanto instrumentales como vocales, aún en una etapa algo temprana como para poder servir de medida para los temas más representativos de la misma, puesto que la serie aún no terminaba de emitirse, por lo que era difícil determinar qué temas eran los que permanecían más en la memoria de los fanáticos.

Es así como de manera algo arbitraria apareció esta placa, que cuenta con la interpretación en sintetizadores del músico Osamu Shoji utilizando en este caso el seudónimo de “The Galaxy”, del que poco se sabe en realidad, salvo que entre sus antecedentes se puede nombrar una modesta carrera como compositor para artistas “pop” en los años 70’s, y haber realizado una peculiar re interpretación de la banda sonora de Star Wars, siendo este proyecto uno de sus primeros acercamientos a la música electrónica, particularmente con el uso de sintetizadores.

Poniéndonos un poco en contexto, los sintetizadores en aquella época parecían ser una especie de innovación, de la que se esperaba mucho, siendo utilizada recurrentemente por los músicos más vanguardistas de aquél entonces, a modo de aportar una textura diferente a sus obras, pretendiendo ir más allá de un sonido al que en muchos casos consideraban “ordinario”, y que sin duda alguna, le aportaba una personalidad única a sus composiciones además de otras propiedades casi cósmicas. Es por eso que este recurso, se encuentra repetidamente durante los años 70’s, en artistas relacionados con el “rock progresivo”, y ya en la década de los 80’s, como la carta de presentación de los artistas relacionados con el movimiento “new wave”, que coincidiendo con el inicio de aquella década, comenzaban a dar la pauta para el sonido de la nueva década.

El uso de sintetizadores era por tanto, un recurso ciertamente vanguardista, pero como es sabido, toda vanguardia se convierte en algún momento en tendencia, lo que llega a crear resultados más prosaicos de lo que la intención original pudo haber llegado a pretender. Es así como en Japón, un país que tiende a "tropicalizar" tantas formas de expresión y arte les sea posible adoptó esta vanguardia y la transformó en tendencia incluso incorporándola a su mercadotecnia.

Retomando ya un poco el tema del álbum en sí, como se había mencionado en un principio, encontramos pues, una curiosa colección de temas, hecha aparentemente de manera algo aleatoria, puede llegar a crear impresiones algo incómodas, los arreglos si bien son interesantes, existen pasajes que a un oído no muy sensibilizado le puedan llegar a parecer demasiado exóticos, o peor aún, la naturaleza de su sonido, debido a la limitada capacidad del rudimentario equipo utilizado pueda llegar a pensar que el resultado musical sea poco más que somero.

Es precisamente el tema de los arreglos realizados a los temas los que causan más “ruido” al escuchar este disco, pues con frecuencia, es muy difícil reconocer algunas de las piezas incluidas, sobre todo las menos memorables, aunque otras como el tema principal Macross o Dog Fighter que literalmente no necesitan presentación, puedan esbozar más bien muecas y levantar cejas o causar sencillamente risa.

Un aspecto curioso del disco es que no encontramos una prominente presencia de los temas originales del personaje de Minmay, incluyendo apenas un par de cortes, balanceados con los temas de Makoto Fujiwara (los temas de apertura y cierre), dejando el resto a temas instrumentales, que parecieran acomodarse de mejor manera a la naturaleza supuestamente más “etérea” de las interpretaciones, tal es el caso de cortes como "Shinchuushiki", "Younenki Owari" y "Tabidachi".

En conclusión podemos decir, que aunque el concepto del álbum (y en general de toda la serie "Digital Trip"), la representación final del mismo resultó tal vez demasiado extravagante, casi rimbombante, algo que a oídos más “lugareños”, tal vez no cause un conflicto, pero desde nuestra perspectiva occidental, definitivamente es un viaje como el título sugiere, pero uno un tanto estrafalario y difícil de digerir, aunque también es justo decir, que la duración de la placa no es excesiva y por tanto su escucha tampoco resulta algo insufrible.

Recomendable únicamente para aficionados a la música electrónica más primigenia, melómanos, coleccionistas de la saga o gente de gusto particularmente ecléctico.

Tracklist:

  1. Shinchuushiki
  2. Macross
  3. Shao Pai Long
  4. Younenki no Owari
  5. Ai wa Nagareru
  6. Dog Fighter
  7. Silver Moon, Red Moon
  8. O-G Love
  9. Tabidachi
  10. Runner